Entrevista a Manolo Cabo
Con la ilusión de comenzar en Cantabriarallye.net una nueva sección de entrevistas a los pilotos de antaño de los rallyes de Cantabria, la mañana del día 30 de agosto pasado, fiesta de los Santos Mártires en Santander, nos dirigimos hacia Astillero, donde habiamos concertado cita con MANOLO CABO, piloto puntero de las pruebas automovilísticas de los años 70, 80 y principios de los 90 en nuestra región.
Cabo nos acogió con su habitual amabilidad y nos comentó que sus dos hijos (ambos pilotos del Nacional) tenían literalmente copada su casa. Así pués, para charlar más tranquilamente, nos dirigimos a una cafetería del centro de Astillero donde hablamos de rallyes de entonces y ahora por espacio de casi tres horas. Esta fue la entrevista:

-Eduardo Lastra: Esta pagina web intenta dar toda la información sobre rallyes de Cantabria y creemos que es imperdonable olvidar esas épocas antiguas, de las que no hay información y los aficionados quieren saber más sobre ellas. Queremos hacer una serie de entrevistas de pilotos que vamos a llamar "PILOTOS MITICOS DEL AUTOMOVILISMO DE CANTABRIA" y nos pareció oportuno empezar por ti.
No queremos lo típico; el palmarés del piloto y datos fríos, sino una entrevista con anécdotas, una entrevista entre amigos, en la que intentaremos recoger tu trayectoria, que es muy amplia, aunque seguro que algo se nos olvida.

PRIMERA PARTE: LOS COMIENZOS

-E.L.: En primer lugar: ¿Cómo te enganchaste al mundo de los rallyes?¿Quién te contagió el gusanillo?
-Manolo Cabo: Bueno yo creo que desde que nací. Mi madre me sacó con un coche entre las manos, o con un volante; no sé, es de toda la vida, desde que nací. Yo iba al colegio con la cartera y ya iba conduciendo, iba haciendo rallye por las aceras, y mis hijos también. Desde bien chiquitín he tenido colecciones de coches, todos, aquellos de hierro y de hojalata. Todas esas colecciones las tenía yo entonces. Mis padres y mi familia para tenerme contento me compraban coches y en los reyes...coches. Ya desde pequeño los coches eran una pasión, eran una enfermedad....

-E. L.: ¿Como empezaste a ir a los rallyes?
-M. Cabo: A los rallyes me escapaba, iba con amigos, me llevaban. Porque mis padres, tanto mi padre como mi madre, no tienen nada que ver con los coches. Bueno, a mi padre siempre le gustaron los coches, pero lo que siempre le gustaba era el fútbol; fue incluso presidente del Barquereño. Mis hermanos han jugado en la Gimnástica, jugaron en el Rayo,.... fueron jugadores más o menos buenos. Pero en mi casa fue siempre el fútbol, yo fui el único al que le tiraron los rallyes, las carreras y todo lo que tenga ruedas o huela a gasolina: ahí estaba yo.

-E. L.: ¿Cómo empezaste a correr, en qué rallye, qué año y con qué coche?
-M. Cabo: Empecé a correr primero los slaloms, con 18 años, así que puedes echar cuentas atrás y sabes....(hacia 1970), con un Alpine 1300, en San Vicente de la Barquera hace un montón de años. Como ya he dicho, empecé a correr slalom, con un Alpine 1300, nuevo, a estrenar; me lo había comprado mi padre. Era un coche que en San Vicente decían que era para matar gente....... que estaba en las plazas, porque iba a toda velocidad por el pueblo; corría más en el pueblo que en las carreras. En las carreras solo iba a los slaloms, corrí 2 ó 3 slaloms aquel año.
Tenía muchos problemas con mi familia, no me dejaban correr, porque entonces se veían los rallyes y las carreras como un peligro, mis padres los desconocían, y pensaban que aquello era para matarse.
El Alpine me lo compraron y hoy todavía ni lo entiendo; lo compré en Vidal automóviles en Torrelavega, nuevo, a estrenar, entonces ya valía unas 700.000 ptas. (de entonces).
Empecé a trabajar con mi padre; me dijo: "cuando terminemos estos apartamentos te compro el coche", y yo no salía de los apartamentos, y me lo compró. Me lo prometió y estuve trabajando como un año, pero me lo compró. Así se consiguió el coche.
El Alpine me duró muy poquito, y compré un Coupé 903, de los dos Coupés el moderno, tipo 850 Coupé. En aquella época corrí varios slalom. Después volví a correr slaloms con un Simca 1000, y fui subiendo hasta que empecé con un 1430. El primer rally que corrí con él fue un Rallye de Las Marzas, de Torrelavega, que hoy es el "Ciudad de Torrelavega". Y con el 1430-1600, parte del rally me puse en cabeza, esto con 19 años, con las barras amarradas hasta con alambres, y con aquellas ruedas Firestone Vidobal.
Parte del rallye fui en cabeza; durante tres o cuatro tramos, y después me pegué un bofetón bajando Novales y destrocé el coche. Era de 2ª mano, pero prácticamente nuevo, tenía un año. Estuve todo el año en dique seco porque no tenía coche.
El siguiente año ya comencé a correr más en serio, ya tenía 20 años, con un 124-1600, que era otro 1430-1600, pero ya era un coche más o menos de carreras. El otro era un coche de calle que no tenía absolutamente de nada: unas barras y a correr. El segundo 1430-1600 ya estaba preparado con barras de verdad y con bacquet, y empecé a destacar. Empecé a quedar 2º y 3º de los rallyes. Esto era en Grupo 2. Se me rompía mucho el coche, siempre estaba tapando agujeros: que se me rompía un amortiguador, pues ponía un amortiguador en lugar de poner los dos. En el siguiente rallye se me rompía el otro....
Estuve un año y medio sin terminar un rallye. Recuerdo que en aquella época había en Cantabria 8 rallyes del campeonato de Cantabria, y 7-8 del campeonato de Castilla (antes se llamaban así) y no termine ninguno, era para haberlo mandado todo al carajo, pero seguí en la brecha. Ese coche se volvió a rehacer el siguiente año; estuve dos años más, hasta que compré el 124-2000. Al 1430-1600 ese famoso lo llegue a hacer 1800. Después ya vino el 124-2000, y empecé a ganar rallyes.


SEGUNDA PARTE: EL INOLVIDABLE 124-2000, O-120697

-E. L.: Yo te recuerdo desde chico con el 124 matrícula O-120697 ¿lo compraste nuevo? ¿qué preparación llevaba en sus inicios?
-M. Cabo: Era el coche con el que nunca jamás tenía problemas, nunca se rompía, era un coche con el que gané varios rallyes, y cuando no era 2º ó 3º como mucho. No era nuevo, lo compré hecho entero en Asturias, a un tal Joaquín González.

Con el 124-2000, en el rallye Ramón Glez. de 1982 (cpto. De España), tramo de Cildad. Foto E. Lastra

-E. L.: ¿Qué preparación llevaba? ¿qué nivel de potencia tenías con ese coche, en ese momento?
-M. Cabo: Era un 2000, no un 2100, y estaba muy bien, muy bien. Tenía caja de cambios Colotti, de dientes rectos; todo, todo lo más gordo, pero el motor no era excesivamente gordo; por eso no rompía, pero estaba muy bien revisado todo.
Calculo que la potencia era de unos 160 CV, no era 2100 ni 16 válvulas. Había mucha polémica entonces con los coches que llevaba Javier Aguinaga, Crespo, Ateca, Miguel Martínez; todos creían que mi coche era un 2100. Era 2000 y cuando se rompió el motor dos temporadas después, en Talleres Sama se desmontó el motor y los demás pilotos comprobaron con curiosidad, con los pistones, que era un 2000; pero estaba muy bien hecho de culatas, pistones, etc..
Este coche no se rompía nunca, se rompió por un pasón de vueltas, porque tenía un montón de rallyes, no porque fuera malo.

E. L.: Un elemento fundamental en esto de los rallyes es el copiloto. Te recuerdo, siempre con el 124, con "Jaime" González ¿comenzaste con él?
-M. Cabo: El primer rallye fue con San Millán, hoy conocido en Cantabria por estar en el tema de carreras, rallyes, etc.. Corrí dos rallyes con él: el de las Marzas, y un Costa Esmeralda de Laredo; el último que se ha hecho en Laredo. Se llama Jesús San Millán. Ha corrido en karts, ha sido organizador, ha estado en la prensa, incluso hizo con Sañudo el programa "Cachondo-cachondo". Después, con Jaime estuve una pila de años, éramos amigos y seguimos siendo amigos, y lo dejó por trabajo. Después estuve con varios, Serafo (Vaz), etc., y compaginé con algún copiloto suelto más. Luego estuve 3-4 años con Isidro Pérez, pero por motivos de trabajo lo dejó, porque es médico, el actual médico de la Federación Española de Automovilismo. Por trabajo se tuvo que ir a Burgos. Seguí con Fernando Puras los 6-7 años siguientes, prácticamente el resto. En esta época, con el GT, también tuve un par de copilotos en algunas pruebas, a los que quiero hacer referencia porque son buenos amigos mios: Francisco Barreda y J. Ramón Rubio.

-E. L.: Háblanos de los años 70, cuando los 124, Alpines, Simquetas, etc. eran los amos. Lezama, Echave, Muñiz, Ateca, Pablo Iglesias, Del Aguila, Pradera, Moratal, Felipe Ortiz, etc. ¿qué poso te han dejado aquellos años en la memoria? ¿Qué recuerdas?.
-M. Cabo: Los recuerdos son de medios reducidísimos en Cantabria mientras que los que venían de fuera venían con todo, con ruedas gordas y con unos equipazos de miedo, y cuando los mirabas se te caía la baba. Pero cuando venían los 124, el único capaz de ganarme fue Alberto Hevía, el padre del Hevia de hoy. Fue el único capaz de ganarme en un Peñucas, y me ganó, a pesar de que yo iba 1º, aparte de porque tenía un cochazo y un equipo impresionante y había venido a Cantabria a ganar, había entrenado todo lo del mundo; y porque, no nos engañemos, Hevia andaba muchísimo, lo principal fue porque se me rompió una barra del 124, la barra Panhard que sujeta el tren trasero. Esto fue faltando dos tramos y ahí me gano el rallye. Fue el único capaz de ganarme, porque ni Del Aguila con otro pepino, ni Ateca, Pablo Iglesias.... pudieron conmigo, a pesar de que venían con unos coches impresionantes, con unos medios muy grandes. El pique siempre era con Del Aguila, que en el campeonato de España estaba siempre 4º-5º con el famoso 124-2100 de Albal. Venía de ganar 2-3 años el campeonato de Castilla León, y venía a Cantabria como una estrella con un 124. Siempre que vino con 124, yo le ganaba y además siempre bien ganado. Siempre se extrañaba de que con "esas ruedas Firestone" le pudiera ganar, lo dijo siempre.
En Cantabria la época del 124 fue muy bonita, era como una copa: Aguinaba, Crespo, Paco Martínez, Monchi, Felipe Ortiz, Pablo Iglesias con 124-2100 16 válvulas, Somavilla con 2100, el difunto Cañedo con 124, etc.. Había 8 o 10 pilotos con mecánicas muy similares, y en los rallyes los 124 parecían una copa, porque nos sacábamos entre todos 6 o 7 segundos en un tramo de 15 km.; luego había tramos que estábamos al segundo, había un pique.....era un espectáculo.

-E. L.: A principios de los ochenta, con el 124 pintado de colores, patrocinado por Cacaolat-Clesa, ¿qué nivel de preparación llevabas (Gr. 5, creo), potencia, suspensiones, caja, transmisiones, etc.?¿cuáles fueron tus logros principales?
-M. Cabo: Fue el primer esponsor serio, Cacaolat-Clesa. Con el dinero que me dieron me preparé en las siguientes temporadas para cambiar de coche. Me habían aprobado para hacer el Campeonato de España de rallyes con Porsche, ayudado por Porsche España.
Con el 124 te puedo contar una anécdota del Rallye La Unión, de Puente Viesgo. Corrían dos "cocos": Miguel Martínez, con Porsche 911 gordo (que ganó), y Lezama, con R5 Turbo "culo gordo" (que hizo 2º). Yo hice tercero y marqué un scratch en un tramo donde hoy todavía creo que no se ha conseguido bajar el récord, y se ha corrido varias veces: el tramo de "La Canal". Un tramo que patinaba mucho; muy delicado, entre Soto-Iruz y la carretera de Villacarriedo. En este tramo en su tiempo Martínez hizo creo que 3.18" (sólo recuerdo los segundos) y yo hice 3.09"; Lezama hizo 3.20". El scratch lo hice yo, y hubo polémica porque dijeron que el tiempo me lo habían dado. Pero cuando vino la sorpresa fue en la siguiente pasada, por el mismo tramo, donde volví a marcar 1 sg más; hice 3.10", Martínez 3.15" y Lezama 3.17". Ya no fue casualidad. Recuerdo que en ese rallye nos jugábamos el campeonato regional Paquito Martínez y yo, por eso me acuerdo tan bien. Paquito con Opel Ascona me pegó un palo en Braguia de 9 sg, y en La Canal se lo pegué yo, y me puse delante de él. La Canal era un tramo rey en dificultad, no en longitud.
Ese tramo me gusta, y creo que nadie ha llegado a bajar ese tiempo ni con mucho.

-E. L.: En los ochenta, con el 124 ya negro, tuviste importantes enfrentamientos deportivos con otros pilotos de la región. Con Fidel de la Peña creo que fueron los más intensos. Recuerdo cuando, en un rallye de San Vicente, que le ganaste tras una gran lucha toda la noche, penalizaste por error 1 minuto por adelanto en el último control y quedaste 2º. Jaime incluso creo que lloraba. ¿qué anécdotas y recuerdos guardas de tus enfrentamientos deportivos con Fidel? ¿qué destacarías de él como piloto?
-M. Cabo: No había consuelo para Jaime en aquel rallye. Respecto a Fidel, ha sido un grandísimo piloto, lo ha demostrado. Ha sido piloto de Rothmans, ha sido campeón de Castilla, y en aquellos tiempos quedar campeón de Castilla no era ninguna tontería. Tenía el mejor coche de Cantabria, siempre ha tenido los mejores coches. Cuando la gente corría con un 124 peleón, él corría con un Alpine 1440 de lo mejorcito que había. Cuando los demás corríamos con 124, él tenía un R5 Turbo que era del mundial. Ganar a Fidel era muy difícil. Seguíamos corriendo con los 124 y él corría con un Opel Ascona, que entonces era un coche puntero, como hoy sería un Mitsubishi: coches en grupo N intratables. Entonces los Opel Ascona eran grupo 1 y eran imbatibles. Los 124 no tenían nada que ver con eso, ni siquiera un grupo 5 de entonces. Mariano Lacasa entonces o los hermanos Santacreu eran gente que quedaban con Opel Ascona 2º o 3º en el Campeonato de España.
Entonces estar peleándose con él con 124 era un orgullo para mí, cuando me ganaba él, y cuando le ganaba yo. En un año hubo 3 rallyes, 3 empates, pero como él hacía el mejor tiempo en el primer tramo, porque yo no era tan frío como él, yo siempre iba de menos a más, Fidel iba más continuo, y me ganó los 3 rallyes por hacer el mejor tiempo en el primer tramo.
En 2 ó 3 años hubo una lucha feroz Cabo-Fidel, Fidel-Cabo. Con el Seat yo estaba por delante de los otros Seat, pero la espina era con Fidel, al que ganábamos por 2 o 3 sg. o nos ganaba él. Era una lucha de segundos, una lucha muy justa.

Con el 124 ya negro, ganando el I Rallye Altamira, de Puente San Miguel. Corría 1984. Foto E. Lastra
-E. L.: Tuviste también en esta época importantes luchas más esporádicas con Paco Martínez, Aguinaga y Crespo, entre otros ¿qué destacarías de estos enfrentamientos?¿y de estos tres pilotos?
-M. Cabo: Los 3 son distintos; Crespo echaba más agallas que conducción. Paquito Martínez conducía muy bien y era muy rápido, y también espectacular. Javier Aguinaga andaba muy rápido, no era espectacular, era muy muy fino y entendía mucho de mecánica y siempre tenía el coche perfectamente a punto. También era difícil ganarle, no creas que no
.
-E. L.: ¿Te acuerdas de un rallysprint de Riosapero que ibas muy igualado con Paco Martínez, llegasteis empatados al último tramo y él se salió?
-M. Cabo: Si, me acuerdo. En ese Rallysprint batí el record; entonces no había premios en metálico, pero sí había un bar allí, una cafetería en Villanueva que daba mil duros al que bajara el record, que estaba entonces en posesión de Lezama, con un Escort RS. Y batí el record que estuvo mucho tiempo en 2.21". Creo que al final lo bajó Miguel Martínez Conde con el Clio o con un R5. Me dieron 1000 duros por bajar el record, a pesar de ir empatados en el último tramo y todo el rallysprint. Me tiré a muerte en la última pasada, a mí me salió bien y a él le salió mal.
Parque cerrado en Vilanueva de Villaescusa, despues de ganar Cabo el Rallysprint de Riosapero de 1984 a Paco Martínez. En segundo plano, el Ascona sin luna despues del vuelco. Foto E. Lastra
-E. L.: Para terminar, de momento, con el 124, con él te ganaste la fama de ser un gran piloto en subidas, aparte de en rallyes ¿qué tenía aquel coche (aparte de piloto) que subía tan bien, mejor incluso que otros 124 gordos?.
-M. Cabo: Ese coche fue con el que prácticamente aprendí, yo no había llevado nunca un autoblocante, ni Colotti. Le cogí el tranquillo rápidamente. Era un coche que estaba muy bien compensado, no tenía excesiva potencia, estaba muy aligerado. Tenía capós, puertas y demás de fibra. Era un coche muy compensado en peso. En suspensión tenía lo mejor que había entonces, los Konis amarillos recortados, y tenía unos desarrollos muy buenos para los rallyes, una punta de 160 Km/h, idónea para los rallyes y subidas. Como ya he dicho, tenía una caja de cambios que era una Colotti italiana de las que usaban los fórmulas 1800, la de dientes rectos. El cambio era muy corto y el grupo era muy largo cuando todo el mundo lo llevaba al revés, cambio largo y grupo corto. Los demás siempre tenían problemas con el grupo, que se partía. Al cabo de un par de rallyes, tenías que quitarle el grupo que se rompía o se desgastaba. Este coche no tenía ese problema. Y el mantenimiento, básico: cada 2 carreras, era ponerle los casquillos de biela, que lo hacían los de Sama, y motor nuevo; era el único problema que tenía el coche. Quitabas el cubre-carter, quitabas los casquillos de bancada y ya estaba el coche revisado, le apretabas un poco y no tenía más nada. Estuve 4 ó 5 años con ese mantenimiento.
Quedé campeón de Cantabria 2 años, subcampeón 4 ó 5 y 3 campeón de montaña. El coche lo tenía todo. En las bajadas, como no tenía muchos caballos, había que tirarse. El coche frenaba y se tenía muy bien dentro de lo que era entonces un 124. Tenía frenos gordos de entonces, unos Lockheed, que hoy los tiene cualquier coche de calle, y bastante mejores. Entonces eran una cosa extraordinaria: costaban 250.000 ptas que tuve que pagar en 50 plazos.
Con el 124 pintado de blanco y amarillo, despues de ganar el I Rallysprint Gomar, en el tramo de Hermosa. Cabo ganó tras una dura pugna con el joven y brillante M. Wallem, con Opel Ascona. Esto fue en 1985. Foto E. Lastra

TERCERA PARTE: EXPERIMENTOS CON OTROS COCHES

-E. L.: Antes de dejar el 124 tuviste una fugaz experiencia con el Talbot Sumbean Lotus de Herrero ¿qué nos puedes contar? ¿Cuántos rallyes corriste?
-M. Cabo: El motor estaba echo una porra. El coche se lo compré a Juan Carlos Herrero. Corrí un rallye pequeñito, un rallysprint de Riosapero, con publicidad de Lopez Pablo. Se rompió el coche. Luego salí en el rallye Los Peñucas y solo hice un tramo, porque por detrás no parecía un coche, parecía una locomotora; echaba una humera terrible y gastaba mucho aceite, el motor estaba muy malo cuando me lo habían vendido como que estaba muy bueno. Llegué a un acuerdo con Carlos Herrero y se quedó con el coche. Pero hice pruebas con él, era un coche divertido. Había que repararlo en Inglaterra en Mike Little y costaba una millonada. Yo podía comprar un coche pero no gastar el doble de lo que valía el coche en la reparación; así que llegué a un acuerdo con él y se quedo con el coche otra vez perdiendo una cantidad de dinero.

-E. L.: Luego, jubilaste temporalmente el Seat y corriste algún rallye con el Porsche 911 del equipo Status Motor. Comparado, por ejemplo, con el de Etchebers, no parecía un 911 muy gordo ¿cómo valorarías la experiencia con este coche?¿qué anécdotas tienes con él?
-M. Cabo: Mi mayor ilusión era correr con un Porsche. Entonces, a través de Status Motor y del propietario, Fausto, como concesionario en Cantabria y de Porsche España, tuvimos ayudas y con unos pequeños patrocinadores que yo tenía y con un esfuerzo de mi familia, alquilamos aquel Porsche a un tal Solá, un Porsche blanco, que en el rallye Los Peñucas no arrancó nunca; fue un engaño. El coche no llegó a estar en la salida, aunque llegó a Santander. Se trajo de Barcelona y el alquiler era de 1.400.000 ptas de entonces, que era muchísimo dinero; vino roto de Barcelona. Nos engañaron, nos quedamos sin el dinero y no corrimos el rallye, fue una experiencia criminal. Nos enteramos después que lo había alquilado la semana anterior a un tal Braña o Balaña de Logroño en Alcañiz y había fastidiado el motor y había roto.
Al año siguiente contactamos con Promoservice y alquilamos un Porsche para un Peñucas que ya se llamaba Ciudad de Santander. Era un Porsche de alquiler, el del año anterior era de un particular, el tema cambió. El coche estaba desinflado entero. El coche no andaba tanto como yo imaginaba, corrimos el rallye luchando un poquito, nada más un poquito con Puras con R5 Turbo, al principio, y con Cardín con Lancia 037. Estábamos en la lucha, Puras rompió, Cardín tuvo problemas y quedo atrás; y yo quede detrás de Etchebers con 911 SC-RS. Decían que ese era el 911 más aligerado de Europa. Quedar detrás de él fue un orgullo.
Hablamos con Promoservice que queríamos un coche de verdad. Tuvimos un nuevo contacto 15 días después en el Villa de Llanes. El coche lo patrocinaba Norauto, concesionario Porsche de allí, y Porsche de España. Este Porsche de Promoservice ya era de verdad. En Llanes hice 3 tramos y me salí; fue una salida tonta, porque pinché 2 ruedas, las de la derecha. Di con una acera, fui de costado, di con un muro y no pude seguir porque no tenía repuesto. El coche andaba, solo que no había rueda de repuesto. Hice 2 carreras con el Porsche.

Cabo cruzado en Rio Las Cabras, Rallye Villa de Llanes de 1986, con el 911 de Promoservice. Tras tres excelentes tramos, una tonta salida dio al traste con todo. Foto E. Lastra

-E. L.: Mucha gente seguro que no recuerda que ganaste el primer autocross que se hizo en Cantabria, en Mogro, con un Selex. ¿qué te aportó esta breve experiencia?
M. Cabo: La tierra siempre me ha gustado, en los rallyes que yo he corrido he destacado un poco cuando había niebla o agua, cuando deslizaba. Un rallye de Torrelavega que gané estaba lloviendo, un Altamira lloviendo, un Cobreces también lloviendo, un Club Cántabro de Pilotos que estaba lloviendo, etc.. Muchos de estos rallyes que he ganado eran en condiciones muy malas: Palombera, La Braguía, Castillo Pedroso con niebla, lluvia... y era cuando yo más o menos sacaba al coche rendimiento, porque me gustaba.
Cuando había autocross, llegue a salir con un Dodge Dart, con un 124, con de todo. Compré un fórmula para preparar un campeonato de España de Montaña, patrocinado por Cacaolat, entonces de Clesa. Iba a hacer el campeonato de España de Asfalto y campeonato de España de Montaña y presentamos un dossier y un estudio bien hecho a la empresa. No se me ocurrio más que comprar un fórmula de montaña, y presentárselo a ellos. Les pareció la idea fenomenal, fue arriba hasta que vendieron la empresa a una multinacional y se cortó todo.
La montaña nunca me ha hecho mucha gracia, aunque he corrido mucho. Hay que tener un temple frío, pero nunca me llamó mucho la atención, aunque como no había otra cosa, se corría en montaña.
Siempre he ido de menos a más, y en la montaña se subían 2 ó 3 veces y entonces no llegabas a calentarte. Visto esto, al fórmula no le eché montaña. ¿Qué se me ocurrió?: ponerle unas ruedas de tacos, porque era cuando empezaban los autocross. Corrí la 1ª carrera, el autocross en la playa de Mogro, y lo gané. El fórmula aquel en arena andaba como un monstruo. A todo el mundo se le mojaba el motor y se les gripaba, pero yo no hice nada y no se me mojó; fue como un obús.

CUARTA PARTE: LA EPOCA R-5 GT TURBO; EFICACIA SIN DIVERSION

-E. L.: Si no me equivoco, luego vino el Renault 5 GT Turbo...y otra vez las luchas con Fidel, Paco Martínez, Aguinaga, Crespo, Wallen, José Luis García, Monchi...¿fue mejor época que la del 124?
-M. Cabo: No, fue mucho mejor la del 124; aprendí muchísimo con eso. Siempre lo he dicho y lo sigo diciendo: el tracción delantera no es divertido, es muy eficaz, para andar fino y sacar buenos tiempos, pero no es divertido, ni para el piloto ni para el público. El coche divertido es el de tracción trasera de toda la vida, entrar de costado, bailarlo en una paella, etc.
Yo, antes de comprar el GT, fui a un tramo con el 124 y un GT Turbo prácticamente de serie: ahí me di cuenta de que la diferencia de tiempos era bestial, no tenían nada que ver, el 124 ya se había quedado obsoleto total. Compré el primer GT en Francia. El primer rallye fue el rallye de Reinosa que gané; yo me quedé alucinado. El 2º rallye fue Torrelavega o Altamira. Fue una compra que hice y yo mismo aluciné, el coche iba totalmente de serie. Luego compré el GT que era de Jesús Puras, una verdadera bomba, más serio en todos los aspectos y me di cuenta de que el GT era lo más rápido que había entonces.

Despues de estrenar el GT ganando el Rallye de Reinosa, aquí tenemos a Cabo haciendo séptimo en el Rallye Ciudad de Santander de 1987, con el GT Turbo completamente de serie. Esto es bajando la Aparecida de noche. Cabo lleva el mítico casco naranja. Foto E. Lastra

-E. L.: Aún siendo coches opuestos ¿qué valorarías del Seat y del GT Turbo, los coches con los que más éxitos tuviste?
M. Cabo: El GT era más eficaz, más rápido, se colaba mucho más, se tenía el triple más y era más rápido en general, pero no era un coche divertido. Yo a los rallyes siempre he ido a divertirme, no a ganar campeonatos, que quede bien claro.
Con la cabeza cojo el GT Turbo, pero con el corazón cojo el 124.
Antes de comprar el GT estuve dando muchas vueltas, y llegue a probar los Escort esos RS, que quise comprar. Llegué a un medio acuerdo que al final se rompió con el Escort de Graña y estuve a punto de comprarlo.
Siempre iba a divertirme, nunca me importaron los campeonatos; si gané alguno fue por casualidad, como consecuencia de ganar algunos rallyes, de quedar siempre arriba, pero nunca jamás con esa obsesión de ganar un campeonato. Me di cuenta desde el principio, que ganar un campeonato no llevaba a nada: ni te da publicidad, ni más fama, ni vale para nada.. sólo te conlleva tener más placas en la vitrina. Lo que si recuerdo es la guerra con Aguinaba, Gomez Amigo, con Fidel de la Peña, etc.. A mi no me llama la atención ahora haber ganado 1, 2, 3 o 4 campeonatos de Cantabria, ahora no me llena. Lo que me llena son aquellos recuerdos, aquellas placas de ganar el rallye de Reinosa, Torrelavega o Altamira. Eso son los recuerdos fuertes que yo tengo o de que hay un tramo con un record que hoy todavía no lo ha bajado nadie. Y si lo han bajado, bendito sea quien lo haya bajado.

-E. L.: Recuerdo que retomaste el 124 en un campeonato de España de Tierra en Torrelavega ¿cómo valorarías la experiencia en la tierra, si es que te dio tiempo?
-M. Cabo: Fue con el 124, con publicidad de JMQ, con el copiloto José Mª Quevedo, hoy fallecido, dueño de JMQ. Hicimos 4 tramos, 3 tramos fantásticos, tiempos muy buenos y en el 4º tramo se rompió el grupo y se fue todo al garete. Una experiencia muy buena. Hicimos buenos tiempos y aquello fue muy comentado.

Desempolvando el 124 para correr un rallye de tierra, campeonato de España. Esto es el parque cerrado de Torrelavega. Foto E. Lastra
-E. L.: Luego volviste al GT, el S-9027-M, que despues vendiste en La Rioja. Al principio el GT gris parecía ir de serie; cuando lo pintaste de azul y blanco parecía más preparado, y luego de blanco y rojo, el S-M, tenía pinta de ir más gordo ¿qué nivel de preparación llevabas al principio y al final?
-M. Cabo: Lo único que le puse fueron suspensiones, porque ese coche tenía suspensiones de circuito, y le puse suspensión de rallyes. El coche era prácticamente de serie, entonces me patrocinaba Olivetti. Hice una temporada muy buena, gané varios rallyes, entre ellos el rallye Reinosa, el de Altamira, un Club Cántabro de pilotos y después quedé muy bien en la Bien Aparecida y en Peña Cabarga.
Con el GT Turbo de Olivetti en dos ruedas subiendo Peña Cabarga. Esto debe de ser en 1987-88 y Cabo peleaba por los carrozados con Porsches 911 (De Cos) y con Alpines gordos (Gabilondo). Foto E. Lastra
Luego ya compré el GT turbo de Puras, S-M, que aquel ya era más gordo. Era un coche que había hecho Chus para él, para correr la copa Renault.
Antes de este coche compré un R5 Turbo, culo gordo, a un notario de Madrid, a "Prudencio", que corría con un Sumbean Lotus. El R5 había sido de un asturiano, Gevo Puig. Fue en aquella época, lo acababa de comprar a principio de temporada, cuando vino la normativa que prohibía los grupos B, que nadie esperaba. Recuerdo que corrí el primer rallye con ese coche, un rallye de Renedo, donde lo estrene; rompí el motor en el tramo de Ibio, corrí 2 ó 3 rallyes con él y vino el Caja Cantabria y no podía salir con el coche porque el grupo B estaba prohibido. Entonces se me ocurrió lo del GT gordo, y me empeñé hasta las narices, y compré el mejor GT de España, el de Puras. Recuerdo que estaba expuesto y cada vez que iba o venía a San Vicente, aquel coche era una atracción para mi. La víspera del Caja Cantabria me entregaron el coche y salí (gano Puras con el Integrale) y quedé 2º de la copa Renault después de Azcona y 2º de los GT turbo y 2º cántabro, después de Puras. No recuerdo si fui 9º o 10º.
Uno de los pocos accidentes de Manolo: con el GT ex Puras en un Rallye de Reinosa que ganó Martínez-Conde con otro GT, pero gr. A. Foto E. Lastra

QUINTA PARTE: LOS ULTIMOS COCHES

-E. L.: Llegamos al final de tu carrera como piloto. Háblanos de tus últimos coches
-M. Cabo: Con el 5 Turbo aún quedé 2º en Peñacabarga. Después tuve un Deltona que alternaba con el R5 Turbo. Con el Lancia Deltona, corrí algún rallysprint en tierra, algún slalom en tierra. Gané varios. Después corrí el rallye de Solares con él, en grupo N. Quedó Azcona 1º con el ZX de la Copa y yo quede 2º con el Lancia. Tuve problemas y Azcona me ganó en el último tramo. Me ganó en Hermosa, un tramo de los que más me gustan de Cantabria. Después he corrido varios en tierra; hasta ha corrido mi hijo Manolo con él, en Colindres.

SEXTA PARTE: CONCLUSIONES Y CONTRASTES: ANTES Y AHORA

-E. L.: Para terminar ¿cómo ves los rallyes del regional ahora?¿y los coches, en comparación con los años 80?¿Cambiarías tu época por esta?. Yo, como aficionado, me divertía más antes, con más tracción trasera ¿tu, como piloto, como lo ves?
-M. Cabo: Yo no cambiaría nunca lo de antes por lo de ahora. Primero, porque entonces éramos un grupo de amigos que íbamos a correr y nos lo pasábamos muy bien: incluso íbamos a entrenar juntos, era una fiesta entrenando. Ibamos una o dos semanas antes y aquello era fiesta. Los gastos eran infinitamente más pequeños; con un juego de ruedas corría toda la temporada. Las revisiones eran entre amigos prácticamente, las asistencias eran entre amigos, siempre. Hoy es todo profesional, incluso hasta los que empiezan. Siempre hay excepciones, pero hoy te quedas alucinado, ves como cambian las ruedas de atrás a las de delante, cada tramo; cada 2 tramos cambian ruedas, ruedas de la última generación.
Hoy, cuando hablamos de los que están en cabeza, son muchos millones de presupuesto: Gómez Amigo, Jonathan de Miguel, Dani Sordo Jr. DANI es uno de los pilotos revelación de Cantabria. Es una pena que tenga un problemilla ahora, y esté enfermo. Esperemos que se solucione enseguida. Es un chaval que me encanta como va y como ha ido, como corre, como anda. Es una espina de muchos pilotos, porque es un chaval que ha demostrado que tiene maneras. Es muy simpático, agradable; que anda con la verdad por delante, es un chaval muy muy sano y yo creo que va a tener mucho futuro. Es una pena que tenga esa enfermedad, pero yo creo que con los años que tiene va a salir adelante, seguro. En mi casa se le conoce desde chiquitín, le tenemos mucho cariño y estamos pendientes de su enfermedad y estamos convencidos de que cuando empiece va a empezar fuerte; tiene maneras de campeón.
Pero hoy en las carreras, vamos a ser realistas, tiene la grandísima suerte de tener a su padre, como Jonathan de Miguel tiene la suerte de tener al suyo, y como mis hijos tienen la suerte de tenerme a mí. Porque si tus padres no quieren saber nada de esto, las ayudas son mínimas y tienes que ir a trancas y barrancas. En mi época, yo tenía que buscarme la vida para poder correr como fuera, con sponsors de estamentos oficiales, etc..
Hoy el nivel que hay es impresionante, ver en un regional las asistencias que hay, y los neumáticos que tienen, se me nubla la vista. También es verdad que hoy hay más intereses creados, deja de ser tanta diversión como era entonces, hoy prima mucho ganar; ya hablamos de otra cosa. Siempre hay excepciones, porque yo admiro igual a Jonathan de Miguel que está arriba o a Dani, como admiro al último que va con el 124 o con el 205. Tienen tanto mérito unos como otros.
Hay una cosa fundamental a la que yo le he dado mucha importancia: los sufridores de los COPILOTOS, a los que no se les da la importancia que tienen. Hay gente que no se da cuenta de que un copiloto va a la derecha, y que no solo tiene por misión cantar notas: tienen que aguantar al piloto, llevar las notas y jugarse el tipo a la derecha, y nunca se valoran; siempre son los despreciados. En mi casa, en mi equipo tiene tanto o más valor que el piloto, SIEMPRE han sido importantes, y hoy tengo una gran amistad con todos los que he tenido, y no somos amigos, somos hermanos. Los copilotos, aparte de ser un gran amigo, se merecen igual o más fama que los pilotos. Solo por el hecho de sentarse a la derecha de un loco, de una persona que va muy rápido, tiene un valor impresionante, mucha confianza, fe. Tiene que cronometrar y cantarte las notas curva a curva, para no equivocarte. Porque tu te equivocas, te sales y te vas para casa, pero ¿y el daño que haces al copiloto que va a la derecha?

-E. L.: Agradecemos a Manolo Cabo el tiempo que nos ha dedicado en esta agradable charla, de la cual hemos aprendido mucho.
-M. Cabo: Al contrario, yo estaría horas hablando de coches. Agradecer a Cantabriarallye.net el haberos acordado de mi. Estoy a vuestra disposición para lo que os haga falta. Para terminar, os voy a adelantar una primicia, para todos los aficionados. Hemos estado estudiando, una serie de pilotos antiguos de Cantabria, hacer una carrera independiente. El año pasado nos reunimos unos 25 pilotos, y este año nos reuniremos unos 40 y estamos pensando hacer una especie de carrera de campeones, lo que hará que pilotos de entonces podamos probar esos Mitsubishi que hay hoy y divertirnos nosotros y divertir a esa gente que iba entonces a vernos. Sería en un tramo cronometrado, con Mitsubishis o con unos Toyotas. Es el estudio que se esta haciendo. Esto es una primicia. Es factible que se haga porque todos queremos hacerlo. Yo si no tengo pelas, lo busco.
Un saludo a toda la afición.

Eduardo Lastra

-Agradecimientos: Mi más sincero agradecimiento a Bego Dudagoitia por la ingente labor de transcribir la entrevista de la cinta al papel y dejarla lista para los retoques finales. Agradecer tambien a Manolo Cabo su excelente disposición, su amabilidad y su simpatía durante toda la entrevista. Agradecer a Cantabriarallye.net la entusiasta respuesta ante el proyecto de iniciar esta nueva sección, que esperemos sea del agrado de todos los aficionados, pilotos y copilotos.

Eduardo Lastra y Manolo Cabo, en un momento de la entrevista




Este artículo proviene de CantabriaRallye.Net
http://www.cantabriarallye.net

La dirección de esta noticia es:
http://www.cantabriarallye.net/modules.php?name=Sections&op=viewarticle&artid=2