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Ander
Vilariño, se impuso en la Bien
Aparecida
Foto :CantabriaRallye.net
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Egokue,
tuvo que conformar con la segunda
posición
Foto :CantabriaRallye.net
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Santamaria,
fue el tercer clasificado, con su
Formula
Foto :CantabriaRallye.net
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Cardin,
con su nuevo vehículo, fue el líder
en Carrozados.
Foto :CantabriaRallye.net
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Comenzaba la el "fin de semana" de la Montaña, pues teníamos dos pruebas míticas en nuestra región, con una bonit5a inscripción. Las pruebas se "juntaron" con la intención de conseguir disminuir el costo de los participantes, pues así se podía participar en dos pruebas de montaña míticas en Cantabria, con la reducción de los desplazamientos a los pilotos de fuera de Cantabria.
Esto también era un arma de doble filo, pues los pilotos que rompieran algo en La bien aparecida, no tendrían tiempo material para competir en Cabarga.
Aun así, la cosa parecía que era una buena idea y parece que gusto entre los participantes.
Nos preparábamos para ver la prueba REYNA, de la Montaña en Cantabria. La subida a la Bien Aparecida donde hace aproximadamente seis años se fraguo la idea de www.CantabriaRallye.net. Esto ultimo no viene al caso, pero mucho ha CAMBIADO la prueba desde ese tiempo acá.
En esta ocasión nos alegrábamos pues había cosas que nos hacia recordar viejos tiempos, como el Furgón Verde de Chus el de la Heineken, que volvía a estar en su sitio de toda la vida, después de un par de temporadas que se le había ubicado en otros sitios. Esto seria lo único POSITIVO y que hemos rescatado del Recuerdo.
También recuerdo de años anteriores, a varios comisarios , por lo menos cuatro o cinco, que "dominaban" toda la segunda curvona. Además de comisarios, eran aficionados a los rallyes conocidos y respetados por todos, no el típico "chavalito" que cogen de "comisario por un día" y a cambio de un bocadillo, se pasan allí todo el día.
También decir la INEXISTENCIA de ballas de seguridad, si bien el Guardarail que hay en esta curva, no podía albergar a toda la gente que allí se agolpaba. El famoso muro, de esta segunda curva, que en otras ocasiones estaba con los carteles de "prohibido publico", en esta ocasión se había convertido, en las improvisadas Gradas, donde descansaban los espectadores. Digo espectadores, pues los auténticos aficionados no se arrimaban allá, pues ya sabia lo que podía pasar. Y ya para no extenderme mas, quiero hablar de los "espectadores" que se sentaban en la salida de la curva , que decían para si mismos. "JODER, he venido el ultimo y valla sitio que he encontrao". Solo algunos aficionados, les avisaban del peligro que corrían haciendo estos espectadores caso omiso. Solo algún que otro trompo de los coches, les levantaba precipitadamente de la carretera, como a las dos jovencitas que allí estaban.
Como esto no cambie, La Aparecida nos la CARGAMOS. Lo que tomaremos como recuerdo, será la Aparecida en sus buenos tiempos, donde la prueba era preparada por una "peña", que comandada por un AMABLE hombre, que su máxima era que la BIEN APARECIDA fuera la mejor prueba de España, trabajaba INCANSABLEMENTE todo el año, para que todo estuviera en su sitio y que por un saco de sepiolita, y algo de caciqueo fue destituido. Después de esta pequeña "Rentree", pasamos a describir lo que fue la prueba en el tema deportivo que es lo que nos ocupa.
Ander Vilariño fue quien llevo la voz cantante con el Formula Reynard 3000 Gr.E ,de su padre y aunque es un gran vehículo, el piloto no es menos. Tuvimos en la Aparecida el sustituto de Andrés y aunque no queremos jubilar al patriarca de Vilariño Motor Sport, el joven Ander viene por detrás pegando fuerte.
Por detrás de el con un vehículo similar se colocaba Pantxo Egozkue, que ha 9,79 hacia lo que podía y no daba caza al Joven piloto guipuzcoano. La tercera plaza también se marchaba para la comunidad vecina de la mano de Gorka Apalantza con un BRC, estos vehículos muy competitivos con motor de moto que se están colocando en los puestos de cabeza, gracias a su handicap peso potencia. Apalantza se colocaba a 15 segundos del líder de la prueba.
La cuarta posición era para otro piloto de la saga Vilariño, que no era otra que Angela Vilariño, que se convertía en la primera dama, que se colocaba entre los cinco primeros puestos. Aunque no tenemos que olvidarnos de la otra dama, que corría a los mandos de un Fiat Punto, la asturiana Paloma Alvarez.
Ya hemos oído hablar de las dotes de conducción de Angela y la cosa no nos sorprende, pues teniendo el "profesor" en casa, la cosa viene de familia.
Cerrando las cinco primeras posiciones estaba Francisco Arbina, que en esta ocasión cambiaba su bonito Simca 1000, con el que en temporadas pasadas nos deleitaba en la aparecida, por un Dallara - Alfa Romeo Gr.E, mucho mas competitivo. Aunque a los nostálgicos como yo, me gustaría volver a verle con su afinado Simca 1000.
Los cinco primeros puestos eran para los formulas y los BRC, para llegar a los carrozados nos tenemos que remontar al puesto 8, que era para Bernardo Cardin.
En esta ocasión Cardin se había traído un Mitsubishi EVO VII de Grupo A, con el que nos sorprendió, colocándose de líder. De todos es sabido que Cardin, ha corrido con las mejores maquinas del momento y solo el venir a la Aparecida a ver a Cardin con el vehículo del momento, era todo uno. Pero en esta ocasión el patrón del "gaitero competición" se había puesto las pilas, cosa que nos alegramos, pues los coches de carreras son para CORRER.
La segunda posición en carrozados fue para otro veterano de las carreras. Gómez Amigo, con su Ford, recién reconstruido, se ponía las pilas y todos nos preguntábamos estupefactos, que le había hecho a su vehiculo. Que forma de "caminar" tenia el vetusto Escort.
La tercera posición en carrozados era para el BMW 320 ST de Sergio Díaz.