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Juan
Ma, vencía también en San Vicente.
Toño López Cagigal, conseguía la tercera
posición con el mismo vehículo
Foto :CantabriaRallye.net
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Amado,
conseguía la segunda posición
Foto :CantabriaRallye.net
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Claudio
Herrera, remonto en la ultima
manga, consiguiendo la cuarta posición.
Foto :CantabriaRallye.net
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La villa marinera de san Vicente de la Barquera, albergaba la celebración
del Slalom de san Vicente, prueba que retomaba al regional Cántabro de
Slalom, con una nueva organización, siendo estos la escudería
Villa de San Vicente.
Una nueva organización, que se vio "desbordada" por la alta
participación de pilotos, que estaban deseosos de participar en esta
prueba, siendo antaño (ahora también lo será), la favorita
de los pilotos de Slalom, por discurrir sobre tierra (Grija). Varios tracción
trasera, un Lancia delta integrale y los habituales del Regional Cántabro
se dieron cita en la zona de la Playa de San Vicente de la Barquera, donde se
celebraría la prueba.
El circuito muy parecido al de ediciones anteriores era muy largo, rápido
y con varias zonas donde tanto pilotos como publico en general, podríamos
disfrutar de lo lindo.
En la primer manga amado Caviedes con su Ford Fiesta era quien conseguía
el mejor de los cronos, deleitándonos a todos con su conducción,
siendo Juan Antonio Dertiano, quien se colocaba por detrás del piloto
del Ford Fiesta. José Antonio López Cagigal ocupaba la tercera
posición en esta primera manga, siendo Iñigo Arteche el que conseguía
la cuarta posición. Juan Manuel López Cagigal era quien cerraba
la clasificación de los cinco mejores cronos.
Espectáculo del bueno, que no sé hacia nada "pesado",
pues según criterio del comisario de la federación Cántabra,
los coches salían cada 30 segundos o un minuto. Siempre había
espectáculo en la pista.
La tracción trasera era para José Charterina Jr., con su Simca
1000. Charterina disfruto de lo lindo en la tierra de San Vicente, portándose
su vehículo como el mejor de los trasera.
Por detrás de Charterina, teníamos el BMW 325 de Javier Martínez
y el Seat 124 Tunning, de Miguel Gómez, que reaparecía en la prueba
de San Vicente, para divertir y dar espectáculo, con su vehículo.